El arte de la esquina
Año XIII
N° 167
1 de diciembre
de 2019
Texto:
Alicia Grela Vázquez
Imagen:
Elsa Sposaro
SUMARIO
La Mítica Belle Époque
Mes celta del Saúco
La Mítica Belle Époque
Al período de 1890 a 1914, que abaracó un cuarto de siglo, se le denominó falazmente Belle Époque. Esta designación pretendió apelar irracionalmente a un mítico Paraíso Perdido, una Edad de Oro pasada. Pero esto poco tenía que ver con la Verdad histórica, social, política o económica. Para millones de personas esa etapa estuvo muy lejos de ser bella.
La Belle Époque
El mundo industrial de entonces, fundado en el lucro, tenía como supuesto básico subyacente, la dicotomía: ricos y pobres, burgueses y proletarios, capital y trabajo, alma y cuerpo. Los asalariados no eran más que mano de obra más o menos calificada. A solamente eso se reducía un ser humano: a su fuerza de trabajo.
New York
Para recomponer e integrar lo dividido y superar la dualidad el filósofo alemán Friedrich Wilhelm Nietzsche, criticó la sociedad de su momento por su secularización con una sintética y equívoca frase: Dios ha muerto. Integró en su obra lo apolíneo (racional y luminoso) con lo dionisíaco (irracional y oscuro). Paul Ricoeur lo consagró como uno de los grandes maestros de la sospecha.
Nietzsche
La Ilustración impuso la creencia en la ciencia y el progreso. Esta confianza se transformó y sustituyó a la fe religiosa, pero lo hizo tan ciegamente como la anterior. Ejemplo de esto fue el Darwinismo social y económico, que propugnaba la supervivencia de los mejores, los más aptos y mejor adaptados. Éstos serían los más exitosos: los poderosos.
Darwin con su esposa Ema
Por otra parte, Thomas Robert Malthus influyó sobre la Economía Política. Consideró que la humanidad crecía según una la progresión geométrica, mientras que los recursos alimentarios lo hacían mucho más lentamente (en forma aritmética). Por eso propuso limitar la multiplicación de la población y el desarrollo demográfico. Para ello sugirió algunos frenos.
Thomas Robert Malthus
Obstáculos privativos o voluntarios: la restricción moral: castidad, abstinencia o retraso del matrimonio; y los vicios: libertinaje y prácticas contrarias a la naturaleza. Obstáculos destructivos o involuntarios: la miseria: los trabajos penosos, el hambre, las enfermedades y las desgracias: guerras, conflictos políticos y catástrofes naturales.
Aún con el lastre Malthusiano, el período pudo concretar enormes logros culturales desde la Ciencia, la Técnica y las Artes. Las dos primeras trabajaron mancomunadamente. Eso permitió un mayor crecimiento y facilitó la preparación armamentista para la contienda bélica que se avecinaría, con la producción de automóviles y aviones.
Automóvil de Cadenas
Biplano de los Hermanos Wright, 1903
Los recursos por los que habría de disputarse la IGM: el hierro y el acero posibilitaron grandes cambios en la estructura y aspecto de las grandes ciudades industriales. Los edificios crecieron en número y altura, así como los pisos. El ascensor pudo hacerlos accesibles, sin sacrificar los usuarios, proporcionando un medio eficaz para incrementar su satisfacción y comodidad. Un ejemplo emblemático fue la Torre Eiffel.
Exposición Mundial de 1889
La electricidad se sumó a los avances y posibilitó otros como el cinematógrafo de los Hermanos Lumière. Este invento se construyó sobre la base que les ofreció la fotografía. Además, dio comienzo a una nueva actividad artística e industrial: el cine y a un conjunto amplísimo de profesiones (como las de utileros, iluminadores, camarógrafos, escenógrafos, maquillistas, vestuaristas, guionistas, actores y actrices).
Hermanos Lumière
Más de cien salas de cine se inauguraron (sólo en la ciudad de París) desde el comienzo del siglo XX hasta un año antes del comienzo de la IGM (entre 1900 y 1913), para exhibir las atrayentes producciones. Otros espectáculos también incrementaron su concurrencia. Los cabarets: Folies Bergere, el Chat Noir y el Moulin Rouge alcanzaron su punto cumbre en la Belle Époque.
Camarógrafo y Carlitos Chaplin
El Cine y el Teatro así como otras empresas ofrecieron sus servicios y productos (una enorme variedad de otras mercancías) valiéndose de la Publicidad. Para ello recurrieron a los trabajos de los muchos pintores que se concentraban por entonces en el barrio parisino próximo al célebre Cementerio de Montparnasse, en el cual se guardaban los restos de otros.
Muchos artistas e intelectuales vivían en París, sobre todo en Montmartre. Éste fue el Barrio de las Artes, que contó con la presencia de Toulouse-Lautrec y Modigliani entre otros grandes. La cartelería publicitaria tuvo la impronta inconfundible del checo Alfons Mucha, distintiva del Art Noveau, que sirvió de modelo para los diseñadores.
Sara en Gismonda de Victorien Sardou - Alfons Mucha
La Plástica también tuvo destacados representantes entre los escultores durante la Belle Époque, como Auguste Rodin, Aristide Maillol y Antoine Bourdelle. Por su parte la Literatura contó con grandes escritores, muchos de los cuales fueron considerados filósofos como: Henri Bergson y los misóginos Friedrich Wilhelm Nietzsche y Arthur Schopenhauer.
Henri Bergson
Mes Celta del Sauco
Calendario Arbóreo Celta
El saúco o sambuco cuenta con variedades arbóreas y arbustivas. También se le llama buen árbol por sus múltiples propiedades terapéuticas. Es caducifolio en ambos casos. Sólo en Galicia tiene una treintena de nombres. Pero ése con el que está consagrado proviene del griego: sambuké que significa flauta. Esto se debe a que con su dura madera posteriormente ahuecada se confeccionaba ese instrumento musical de viento.
Flauta de saúco
El saúco ha sido muy apreciado desde la antigüedad por sus múltiples propiedades medicinales. Su uso más frecuente ha sido como antiinflamatorio, diurético, laxante, depurador y desinfectante. Era costumbre que se lo plantara cerca de las casas por ser repelente de insectos y roedores. Esto se debe a que entre sus ramas anidan diversas especies de avispas predadoras que controlan la proliferación de esas plagas.
Flores de Saúco negro
El saúco es uno de los árboles más profunda e íntimamente ha sido asociado a las tradiciones feéricas. El culto cristiano, quizás para quitarle el sustrato mágico pagano, refirió que el saúco era árbol del cual se colgó Judas Iscariote, arrepentido de haber traicionado a su Maestro. Además el nuevo culto agregó que de su madera estuvo hecha la de la cruz en que se clavó a Jesucristo. Aunque esto es discutido por el Islam.
Judas traiciona a Jesús con un beso – Giotto
Al saúco se le han agregado otras connotaciones negativas, como su vinculación con las brujas, y lo que esto implica adicionalmente: la magia negra y la hechicería. Los frutos de esta planta son nombradas en muchos lugares, tanto de España como fuera de ella, como uvas de bruja. La razón de esto tal vez haya que buscarla en las propiedades alucinógenas de sus bayas, que antiguamente eran usadas en ritos religiosos para profetizar.
Uvas de Bruja
El saúco fue utilizado en ceremonias fúnebres. Se lo plantaba en las tumbas de los celtas de Escocia e Irlanda, pues se creía que si florecía, entonces el alma de la persona que allí yacía, habría encontrado la felicidad en la tierra del eterno verano, el Tir na N´Og de la mitología gaélica.
Tierra del Eterno Verano
La Mitología Nórdica en Dinamarca habla de la Madre Saúco o Hyldemoer como de una anciana vestida de negro que acecha a las personas con propósitos vindicativos. Se cuenta que ella molestaba a los niños que dormían en cunas hechas sin permiso con la madera de ese árbol, hasta que los mayores los sacaban de allí y los acostaban en otro lugar.
Hyldemoer o la Madre Saúco
Por su parte la tradición germánica tiene a la Dama del Saúco. Al igual que la Madre Saúco, ella también representa a un Espíritu de la Naturaleza que habita en todos esos árboles. Ella es la bondadosa Frau Holle, la Señora de la Nieve, protectora de esas plantas y de los caminantes. Este ser inspiró a los Hermanos Grimm para escribir su cuento infantil.
Frau Holle
En esa misma cultura, la teutona, hay referencias negativas, oscuras y tétricas vinculadas con el saúco. Un ejemplo es la costumbre de medir a los muertos para construir los ataúdes en que posteriormente se los enterraría, empleando varas del saúco. En tierras tirolesas se coloca una cruz hecha de ese árbol sobre la tumba. Si brota, es indicio de que el alma del fallecido descansa en paz. También son tenebrosas sus aplicaciones, cuando las mediciones son usadas en brujerías.
Vara de Saúco para Medir
Como contrapartida mágica favorable está la práctica serbia, según la cual las parejas se casan portando una ramita de saúco, para augurar una unión perdurable. Por su parte, entre los anglo sajones se acostumbraba a recoger sus hojas en el último día de abril para colgarlas sobre las puertas, para impedir el ingreso de las brujas.
Hojas de Saúco
Para los celtas y otros paganos el saúco era habitado por elfos y hadas. La tradición gala, que lo consideraba fruto sagrado de la tierra, establecía que el vino elaborado con sus bayas (las uvas de bruja) sólo podía ser bebido por los druidas. Ellos celebraban reuniones al pie de esta planta, que estimaban debía ser cuidado por los humanos como lo era por las hadas.
Elementales Druida
Estos hombres, los más sabios de los suyos, creían que si se maltratara a un saúco (o lo talara) las criaturas feéricas que habitaban en él, castigarían al ofensor por ello. Para cortar una parte minúscula era preciso solicitar la autorización de estas entidades protectoras. Hay quienes afirman que sus ramas han sido usadas para la elaboración de varitas mágicas, que el cristianismo reelaboró y reinterpretó.
Varitas Mágicas
El saúco representa la muerte y el renacimiento. Por esa razón es que su mes en el calendario arbóreo celta se sitúa entre noviembre y diciembre, la época oscura del año, en el Hemisferio Norte. Durante ese período la Naturaleza parece extinguirse, pues se sume en un estado cíclico de vida latente, para luego reanimarse, reactivándose nuevamente en cada primavera.
Paisaje invernal Saúco rojo
Esto puede constituir un mero juego, una diversión entretenida. Pero el Saúco es un árbol considerado mágico y de un enorme caudal simbólico. Así, por ejemplo la tradición cristiana ha hecho de él un emblema de la tristeza, el duelo y la muerte al tomar como referencia los hechos narrados en los Cuatro Evangelios referidos a la condena y el sacrificio de Jesús.
Los Cuatro Evangelistas – Karolingischer Buchmaler
Esta Representación de los Cuatro Evangelistas de Karolingischer Buchmaler también tiene su correspondiente simbología propia. Según se muestra en la imagen, Mateo es el hombre-ángel; Marcos es el león alado; Lucas, el toro alado y finalmente, el más joven de ellos: Juan, el águila. Por eso se cree que algunos pueblos han considerado al saúco como un árbol maldito y han tratado de mantenerse alejados de él. Los romaníes, por ejemplo, evitan usarlo en sus hogueras.
Fogata invernal
Al hacerse hegemónica y universal la religión cristiana, con sus variantes católica y protestantes, llevó sus creencias y supuestos fuera del Viejo Continente. Toda su cosmovisión se impuso al resto del Mundo, incluso más allá del Hemisferio Norte. En el Sur la percepción de la Naturaleza es inversa a aquella septentrional, que le dio origen. Las estaciones del año australes se muestran simétricamente en espejo. Los seres autóctonos y exóticos y sus propiedades características varían. Tal vez con el tiempo, podría hacerse alguna corrección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario