viernes, 6 de marzo de 2009

El arte de la esquina



Boletín Mensual Nº 20 – Año 2
Marzo de 2009





Pieter Brueghel, el viejo


Sumario

Día Internacional de la mujer: Historias, Mitos y Castigos
Italo Grassi
Estética del Renacimiento (Octava Parte)





Día Internacional de la mujer: Historias, Mitos y Castigos
Por la Lic. Alicia Grela Vázquez


Introducción

El castigo ha tomado distintas formas a través de la Historia. De todas sus manifestaciones, el presente trabajo analizará las vinculadas con algunos de los mitos hebreos de creación y los relatos cosmogónicos griegos, por considerar que en ellos están nuestras raíces culturales. Sus cánones nos han venido como un legado.

Desarrollo

En el primer libro del Pentateuco, tradicionalmente atribuido a Moisés, se da cuenta de la creación de los cielos y la tierra, de la noche y el día, en el primer día: “Y fue la tarde y la mañana del día primero.”(1).
Pero es en la jornada sexta en que se procede a la creación del hombre como culminación de toda la obra. Una vez dispuesta la escena (los cielos, la tierra, las aguas del mar) con todos sus aditamentos (los animales de las distintas especies, en sus dos géneros) entra el protagonista. “Hagamos al hombre a nuestra imagen y conforme a nuestra semejanza, y señoree en los peces de la mar, y en las aves de los cielos, y en las bestias, y en toda la tierra, y en todo animal que anda arrastrando sobre la tierra.”(2)
De este versículo surge otro dato de importancia: aquí se declara el propósito divino. El hombre es creado para señorear sobre toda la creación. El mando, el poder, el dominio está presente aún antes del surgimiento del hombre, dándole sentido a su aparición.
“Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.”(3)

Esta es la primera vez en que se habla de la creación del hombre. Y en ella el hombre y la mujer son creados simultáneamente y con igual jerarquía. Ambos son hechos a imagen y semejanza de Dios. Varón y mujer tienen además el mismo objetivo en el plan de la creación: dominar sobre lo creado: “sojuzgad la tierra y señoread”(4).



Esta primera versión igualitaria de la creación se reitera más adelante.(5). Curiosamente, sin embargo, no es ésta la recogida por la tradición. La mujer no tiene idéntico origen, según la versión popular, ni está llamada a gobernar nada (ni a sí misma) sino a ser sojuzgada. Pero ¿cómo justificar esta creencia?
Para responder a esto hay que volver al capítulo 2 del Génesis: “Formó pues, Dios al hombre del polvo de la tierra, y alentó en su nariz soplo de vida; y fue el hombre un alma viviente.” Este Dios que aparece aquí no es sino un dios alfarero, un demiurgo, muy distante del creador a partir de la nada (ex nihilo) del capítulo primero.
El Dios artesano toma su materia prima de la tierra para crear al hombre y es en ella que planta un huerto, pasando a ser un Dios agricultor. En ese jardín puso Dios al hombre para que labrara y guardase.
Estando el hombre en el Edén, Dios advierte que “no es bueno que el hombre esté solo” y decide proporcionarle ayuda idónea. Más entre todos los animales no encuentra a ninguno que pueda cumplir con tal requisito. Éstos les fueron presentados a Adán por Dios, para que les diese nombre. Surge de este modo otro propósito divino que hace a la función del varón: nombrar, denominar.
Es así que, no habiendo entre lo ya creado un ser que acompañase adecuadamente al hombre, Dios debe procurárselo, ¿cómo? Dios hizo caer sueño sobre Adán, y se quedó dormido; entonces tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar; Y de la costilla que Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y trájola al hombre.
Dios adormece a Adán para quitarle un hueso de su costado, con el cual hacer a la mujer. Nuevamente es un Dios operario (cirujano) y no un auténtico Dios creador el que efectúa esta operación. Es entonces que Dios se la presenta al hombre, quien dice que ella es carne de su carne, y procede a darle nombre: Issah (Varona), porque del Is (Varón) fue tomada.
Es con la mujer que se realiza este bautismo peculiar, mientras todos los demás seres fueron nombrados por Adán y ese nombre es el que conservan según el texto, hasta hoy. Su denominación no la deben a ninguna otra cosa que a sí mismos. La mujer es nombrada en segunda instancia, su nombre obedece a su referencia: al varón.
En esta segunda versión de la creación ella aparece después de que fuera creado el varón, como un subproducto de él (es huesos de sus huesos, pero no se confunde con él). Pero lo es también por otras dos razones complementarias: es creada para satisfacer una necesidad del varón (lo cual implica compañía y ayuda) y es denominada por él (en el doble sentido: de ser el varón quien le da nombre y de recibir un nombre derivado del nombre del varón).
El hombre aún en esta segunda versión de la creación conserva un vínculo más original con su creador, ya que es de Él de quien recibe el nombre de Adán, ( en hebreo: rojo), quizá por la arcilla (la tierra) de la cual fue modelado; o tal vez por la sangre, símbolo de la vida que recibe. La mujer en cambio es tan sólo el resultado de un robo en la persona del varón, es parte de él, ella le pertenece como compañía y como ayudante (servidora).
Pero Eva es como servidora, pésima, ya que se constituye en la primera de las rebeldes (si exceptuamos la categoría de los ángeles). Y su rebelión es tal que desobedece a su Creador.
Antes de la creación de la mujer, Dios había prohibido a Adán comer del árbol cuyo fruto era el de la sabiduría (del bien y del mal). Y la pena instituida para dicha transgresión era la muerte. Según las Escrituras, Eva no recibe en forma directa el mandato negativo, sino que debió saber de él por interpósita persona: Adán.
La serpiente que era la más astuta de todos los animales (6) dice a Eva que aunque comiera del fruto del árbol de la sabiduría, no moriría (7) y que además, le serían abiertos los ojos y serían “como dioses sabiendo el bien y el mal” (8).
¿En qué puede consistir la astucia de la serpiente? Probablemente en una cualidad tan dudosa como la que Homero atribuye a Ulises, por la cual idea el caballo que le permite tomar la ciudad de Troya y cegar y burlar a Polifemo, entre otras “hazañas”. Pero sabemos que ningún animal malo fue creado, ya que de todos Dios da la conformidad expresa de que era bueno.(9)
La interpretación religiosa hace de la serpiente un símbolo de la presencia del Diablo, para tentar a Eva. ¿Qué interpretación permitiría el Psicoanálisis de un animal tan fálico como el ofidio en cuestión?



El relato dice que Eva al probar encontró que el fruto era comestible, agradable, apetecible y si además proveía de sabiduría, tanto mejor. Es por eso que no sólo ella comió, sino que también le dio a “su marido, el cual comió, así como ella” (10). A consecuencia de esto, advirtieron que estaban desnudos y se vistieron (11). Dios hace para Adán y Eva túnicas de pieles, como vestidos.(12)
El Dios creador torna al artesano (sastre, en esta oportunidad). Pero ¿para qué habría de vestirlos, si ya ellos mismos se habían procurado con qué cubrirse? Podría entenderse que con la transgresión al mandato divino, Adán y Eva, que habían sido creados “descarnados” como seres espirituales, encarnan en los cuerpos que son como vestidos de pieles.
Dios encuentra que estas creaturas han desobedecido y son culpables. Según el esquema de premios y castigos que llega hasta nuestros días, es castigada la conducta que pretende ser desalentada. Es de suponer que Dios no quería que le desobedeciesen (cosa que en el esquema patriarcal autoritario aún vigente se comprende perfectamente). ¿Y qué decir de ser como dioses?
Por un lado, ser como dioses pudo tomarse como que dos eran los pretensores, aunque uno fuese el Dios; o bien, porque se alude a otros dioses, distintos del bíblico. Pero, independientemente de cualquiera de estas interpretaciones, es de suponer que para un Dios que quiere fundar una religión monoteísta (la única verdadera) sería una grave afrenta querer afirmarse como dioses.
Y es por eso que sobreviene el castigo (la pena capital ya anunciada y con aditamentos).
¿Cabe decir de un anuncio que es una promesa, cuando no hay un deseo de cumplimiento en la persona a quien se le ejecuta la acción? Si Dios anuncia a Adán que al comer ese fruto prohibido, morirá, ¿no lo está acaso amenazando?

Y Dios cumple su promesa-amenaza con todos los que han participado de la acción. En primer lugar, con la serpiente, (13) el cumplimiento tiene la forma de una maldición (entre todas las bestias y animales). Además es condenada a moverse sobre su vientre (habría que pensar cómo se desplazaba antes de que esta escena tuviese lugar) y a comer polvo todos los días de su vida (que no se puede referir sin error a un tipo de alimentación). Estos castigos se complementan con los que le reserva en relación con la mujer: enemistad y heridas.
El castigo de Eva (14) abarca distintos aspectos: la multiplicación de los dolores y las preñeces; partos dolorosos; subordinación al deseo del marido y sujeción al dominio del varón. Dios aumenta expresamente en la mujer la sensibilidad al dolor y hace de la maternidad un castigo múltiple (preñez y parto) reiteradamente.
Hace extensivos a ella castigos referidos a la serpiente
(la enemistad entre ambas) y al varón (el trabajo, la expulsión del Paraíso, el desarraigo, el extrañamiento, el exilio y la muerte).
Como si esto fuera poco, es condenada a la vergüenza de su propio cuerpo, al descubrir su desnudez; y al descrédito de su esposo, pues cuando Dios interroga a Adán sobre los hechos, éste la responsabiliza totalmente de lo ocurrido: “La mujer que me diste por compañera, me dio del árbol y yo comí” (15) como si él no pudiese negarse, no tuviese libertad ni voluntad y por lo tanto responsabilidad ( o culpa) alguna.
Pero a la mujer le está reservado un castigo adicional que tiene dos aspectos: el primero el ser la madre de todos los vivientes, y el segundo, el ser rebautizada por Adán, con el nombre con el que ahora la conocemos, ya que Eva en hebreo hace referencia a lo viviente, (16). Esto a su vez implica otra sanción ( que va de suyo) “Adán conoció a su mujer Eva” (17). El sentido bíblico de “conocer” es tener contacto sexual. De esto puede extraerse que no es sino hasta después de la expulsión del Edén en que tiene lugar ese acontecimiento, y no como suele creerse que la pareja es expulsada del Paraíso como consecuencia de haber tenido contacto sexual. El pecado original no es el sexo sino la desobediencia.
Claro que Adán también es castigado por ser culpable de desacato, de soberbia y quizás de amor. Está suficientemente destacado que hubo desobediencia, pero no es seguro que haya habido soberbia en el acto de Adán, quien toma el fruto un tanto pasivamente. No podría decirse que él pretendiese ser como los dioses en el conocimiento (del bien y del mal). Y si así fuese, ¿cómo condenar al intento de Adán (el terrestre etimológicamente) de parecerse a su modelo, si la perfección de cualquier obra se cifra en su mayor aproximación a aquello de lo cual es copia (máxime el hombre que es creado a imagen y semejanza de Dios)? Y si se recurre a la tradición cristiana es más incierto aún, pues cada hombre debe ser una imitación de Cristo (y Jesús es Dios), pero ¿eso no es acaso soberbia?
Adán quizá obró por amor a su Creador o a su mujer o al fruto ofrecido (que se mostraba apetecible), pero seguramente no al conocimiento. Él parece ser un pobre de espíritu, tal como lo presenta el Génesis y habrá que esperar hasta el Nuevo Testamento para que los pobres de espíritu alcancen el Reino de los Cielos.
Para los cristianos Adán (y con él Eva) habría obtenido el perdón de Dios, como consta en el Libro de la Sabiduría (18). Además en el santoral corresponde su celebración el 19 de diciembre y La Divina Comedia del Dante coloca a Adán en el octavo cielo, el de los espíritus triunfantes, (19).
Mas, el castigo expreso de Dios ¿en qué consistió? En impedir que Adán comiera del fruto del árbol de la vida y la sabiduría y con ello se tornase inmortal. Eso en primer lugar se hace extensivo a Eva y en segundo probaría que el hombre no fue creado inmortal. Además maldijo la tierra de la cual el hombre debía extraer, con trabajo su sustento todos los días de la vida (20). Pero ¿esto se limita al hombre varón?
Fue condenado a labrar la tierra que le produciría, con el alimento cardos y espinos (21) y a ganarse el pan con el sudor de su frente, hasta volver a la tierra, “pues polvo eres y al polvo serás tornado” (22). Pero aquí Adán arrastra a Eva consigo, hasta la expulsión del Edén (23). Querubines y una espada encendida guardaban el camino del árbol de la vida para impedir el acceso, ¿de quiénes?... de los condenados al destierro.

Adán y Eva expulsados del Paraíso- Masaccio


La estructura patriarcal nos condiciona a la subordinación y al valor. Es por ese valor que es posible asumir y renegar de la subordinación, sublevarse y rebelarse según el primer modelo dado por Eva.

El primer exilio aparece como castigo a la desobediencia original de Adán y Eva. Y esa medida extrema es repetida como sanción al primer homicida: Caín. Dios fue el juez inapelable que emitió ambos dictámenes. La Historia de la Cultura está emparentada con el fratricidio.
El primogénito de Adán y Eva fue Caín (agricultor). Luego nació Abel (pastor). Cada uno de ellos ofreció a Dios lo mejor de su producción. Yahvé se complació la ofrenda de Abel, pero le desagradó la de su hermano (24).




“Caín dijo después a su hermano Abel: ´Vamos al campo´. Cuando se entraron en el campo, Caín se arrojó contra su hermano Abel y lo mató. Yahvé preguntó a Caín ´¿Dónde está tu hermano?´, y él respondió: ´No lo sé ¿soy acaso el guardián de mi hermano?´. Entonces Yahvé le dijo: ´¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano grita de la tierra hasta mí.´¨


Y ahora el castigo:

“Por lo tanto, maldito serás y arrojado de la tierra, que ha abierto sus fauces para empaparse con la sangre de tu hermano, derramada por ti.”
“Cuando cultives la tierra no te dará ya sus frutos. Andarás errante y vagabundo sobre la tierra.”
“Caín dijo a Yahvé: ´Mi iniquidad es tan grande que no puedo soportarla. Tú me arrojas de aquí y tengo que ocultarme de tu mirada; errante y fugitivo, vagaré sobre la tierra y cualquiera que me encuentre me matará. Díjole Yahvé: ´No será así; si alguien matare a Caín, será éste vengado siete veces´. Y Yahvé puso una señal a Caín para que nadie que lo encontrase lo matara.”


Caín y Abel – Marc Chagall -1960

El texto citado muestra el conflicto entre dos sociedades en pugna: la vieja organización de los pastores, representada por Abel, y la naciente cultura agrícola, expresada por el primogénito rebelde. Cada sector ofrece lo mejor de lo que produce a su Dios, que sólo recibe de buen grado lo tradicional y recela de lo nuevo y lo rechaza.
Entre Caín y Abel la tragedia trasciende los límites del drama familiar. El enfrentamiento mítico simboliza la lucha entre dos formas de vida que aparecían como mutuamente excluyentes. En el relato la nueva economía vence a la vieja, tras el necesario homicidio. No puede imponerse el sistema nuevo sin exterminar al anterior.
Toda nuestra cultura es la resultante del fratricidio original, ya que Abel no dejó descendientes, todos somos herederos de Caín.
Por otra parte la idea de castigo en el mundo griego se corresponde con la semita. Tienen en común: el pecado. Y el peor de todos es la hybris, el exceso, la transgresión. Los titanes Prometeo (prudente) y Epimeteo(torpe), también hermanos tuvieron por misión la creación de los animales y del hombre, respectivamente. Ambos cometieron el pecado del exceso y, por lo tanto, debieron ser castigados.


Prometeo

La tragedia griega muestra a Prometeo transfigurarse desde Esquilo a Eurípides, pasando por Sófocles. Los filósofos Platón y Aristóteles lo incorporan con Hércules (su salvador) y Quirón, (el centauro que se ofrece a cambio para el sacrificio) en varias de sus obras.
Con el robo del fuego divino Prometeo pretende compensar la debilidad y carencias del hombre. En esta labor es ayudado por la diosa Palas Atenea (Minerva) que dota al hombre de lo que le es más propio: el logos ( la palabra, la razón).


Palas Atenea – figura roja en ánfora- siglo VI a.C.
Antikenmuseen, Berlin

En cuanto a merecer castigo hay otra determinante: el culto y el sacrificio. Prometeo intenta engañar a los dioses, sin lograrlo. Por eso Zeus (Júpiter) lo castiga y manda a su hijo Hefaistos (Vulcano) encadenarlo al Monte Cáucaso, para permitir que un buitre le devore el hígado (que vuelve a crecer) para perpetuar la condena.


Zeus con águila y el rayo- figura roja en ánfora- SV a.C. Musée du Louvre, Paris


Hefestos- figura roja- Siglo V a.C. – Museo de Arte de Toledo


Prometeo encadenado


Epimeteo fue condenado por el casamiento con Pandora (Todos los regalos), por haberse excedido en su prodigalidad en dones para los animales. Esto llevó a su hermano a verse obligado a conceder otras gracias a los hombres, que nivelasen sus desventajas.


El Greco - Epimeteo y Pandora. Tallas en madera policromada. 44cm de altura Epimeteo; 43 cm de altura Pandora. Museo del Prado (Madrid)

Pandora y Hefesto- figura roja en ánfora- siglo V a. C.- Ashmolean Museum

Pandora (la primera mujer) es un emprendimiento conjunto de los dioses Hefaistos y Palas Atenea y un instrumento de castigo para el titán. Ella, Pandora le es dada como regalo por los dioses que añaden como presente de bodas un ánfora ( caja ) que no debía ser abierta sino hasta después de que se hubiesen casado.

Epimeteo que además de torpe era precipitado y ansioso no esperó tanto y al destapar el recipiente permitió que saliesen los males que hasta hoy pueblan el mundo ( el dolor, la enfermedad, la muerte, etc.).


La creación de Pandora- siglo V a. C.- Ashmolean Museum, Oxford, United Kingdom

La tradición sin apoyo textual atribuye no obstante, a la curiosidad femenina tales estragos. Nuevamente es la mujer portadora y merecedora de castigo, con razón o sin ella.
A los hombres, beneficiarios del fuego los alcanza también el castigo: los males contenidos en el ánfora se han derramado por el mundo. La esperanza (en rigor: la falsa esperanza) ha quedado en el fondo y es quizás por eso, lo último que se pierde o bien en el mundo no la hay.

Conclusión

Nuestra cultura es heredera principalmente de dos tradiciones que se han fusionado: la hebrea y la griega. Con sus mitos nos ha llegado un paradigma de castigo como así también de aquello que merece ser sancionado. La desobediencia y la rebeldía son motivos suficientes para ello (entonces y ahora).
El desafío actual debe ser la superación de estos mandatos y prohibiciones ancestrales.


Notas
(1) Génesis 1:5 (13) Gén.3:14 y 3:15
(2) Gén. 1:26 (14) Gén. 3:16
(3) Gén 1:27 (15) Gén. 3:12
(4) Gén. 1:28 (16) Gén. 3:20
(5) Gén. 5:1 y Gén 5 2 (17) Gén. 4:1
(6) Gén. 3:1 (18) Sabiduría 10:2
(7) Gén. 3:4 (19) Versos 3601-3740
(8) Gén. 3:5 (20) Gén. 3:17
(9) Gén. 1:31 (21) Gén. 3:18
(10) Gén. 3:6 (22) Gén. 3:19
(11) Gén. 3:7 (23) Gén. 3:22 y 3:24
(12) Gén. 3:21 (24) Gén. 4


Bibliografía
La Santa Biblia
Ediciones Paulinas, 17ª edición. Madrid, 1986

Homero: La Ilíada
Editorial Sopena, 6ª edición. Buenos Aires, 1965
La Odisea
Editorial Sopena, 3ª edición. Buenos Aires, 1962



El presente trabajo fue expuesto en las I Jornadas Interdisciplinarias sobre el castigo organizadas por la Facultad de Derecho de la Universidad de Mar del Plata, 2003.


Homenaje a Ítalo Grassi en el mes de su nacimiento
por la Prof. Elsa Sposaro


El artista debería valer por su obra y no por la trascendencia que le da un curador, una galería o la prensa y el mercado.
El público es muy importante, como así la valoración y reconocimiento del trabajo del artista.
Los gobiernos, lamentablemente recuerdan que la Cultura es un pilar importante de la sociedad cuando en tiempos de elecciones llenan sus discursos de promesas de aumentos en presupuestos y reconocimientos a los artistas. Pasado este tiempo, no sólo no recuerdan sus promesas sino que cometen crímenes imperdonables.
Como consecuencia de esto, la sociedad se ve privada de la obra de arte, tan generosamente dada. Tal es el caso del Mural de la Avenida Independencia, entre las calles Belgrano y Rivadavia de la ciudad de Mar del Plata, realizado nada más y nada menos que por el maestro Italo Grassi.


Mural de Av. Independencia, demolido

En esta ciudad la Universidad de Mar del Plata, se dicta la Tecnicatura en Gestión Cultural. Qué gestión cultural se puede hacer cuando los gobiernos no saben reconocer el valor de una obra de arte, como el mural mencionado, demolido en 1995.

Ítalo Grassi nació en la ciudad de Mar del Plata, Argentina, el 21 de marzo de 1914.

El artista plástico Italo Grassi, ha dedicado toda su vida al Arte. Diferentes han sido los medios utilizados para ello. Así ha escrito libros como "La muerte de la pintura", "Historia del arte en América" y "La imaginación creadora en el arte", entre otros.

Decimos que ha vivido su vida en el Arte, ya que a los catorce años pudo comenzar a prepararse con grandes maestros como Edgardo Arata, Alfredo Simonazzi, Juan Carlos Castagnino y Urruchúa. Pero también decimos que su vida se caracteriza por la coherencia, noble característica en una persona, cada vez menos vista.
Desde pequeño Italo Grassi supo de la vida del trabajador y las injusticias que con él se cometen, ya que ha trabajado como lavaplatos, mandadero, carpintero, chofer de taxi.


Italo Grassi - El Regreso de la Pesca - 1980


En 1933 se afilió a la Juventud del Partido Comunista, por lo que las Fuerzas Armadas de la Presidencia de Agustín P. Justo lo detuvieron infinidad de ocasiones por participar en actos populares. Hacia 1943 fue detenido y trasladado a la cárcel de Neuquén donde debió permanecer durante dos años.

Italo Grassi - Gaucho argentino - fresco

Grassi en su obra, siempre recordó al trabajador y su lucha. Ha llevado su obra y su ansia de saber al extranjero. Así visitó, Bélgica Bulgaria, Checoslovaquia, España, Francia, Hungría Italia, Inglaterra, Polonia, Rumania y en Rusia realizo dos grandes murales.

Ítalo Grassi además ha tenido su taller en la ciudad de Mar del Plata por donde aprendieron de su arte reconocidos y sobresalientes artistas como Marta Porreta, María Rosa Tola entre otros tantos. Además ejerció la docencia en Balcarce, Dolores, Maipú y Posadas. Se ha destacado fundamentalmente con sus murales.

Italo Grassi pintando un mural

Fue Jurado de innumerables Concursos de Pintura en la ciudad, dando con su presencia y humildad relieve al Concurso mismo como a los seleccionados en éstos.

Joan Lluís Montané De la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA) lo define así:
“Su creación se caracteriza por su expresividad, su dominio de la perspectiva, la fuerza de sus iconos, elementos y símbolos, su adscripción a una realidad que mitifica, que envuelve de arte en letras mayúsculas.
Es un artista que domina la forma, determinando las estructuras, considerando los elementos que deben prevalecer en su creación pictórica y mural sobre el resto para, desde la posición central, irradiar el resto de elementos que componen la sinfonía.
Es un artista sereno, que prefiere construir con determinación, fuerte, potente, segura, buscando el cálculo, la precisión, para que, desde difuminados a superposiciones, elementos concretos a otros superpuestos, cada uno ocupe el lugar que le pertenece.
Es alegórico, pero, a la vez, posee una gran definición de la forma y la estructura, en el sentido de ocupar el espacio para exhibir diferentes tiempos y personajes que son los que prevalecen.
Arraigado a lo popular, se eleva a altas cotas sublimadas y busca la luz porque es un humanista convencido, dado que posee la actitud del buscador, hombre del trabajo, que cree en el esfuerzo, siendo una liberación para alcanzar un fin.”

La última vez que se lo vio en público, fue en la inauguración de la muestra Los Siete Pecados Capitales el pasado mes de octubre en la ciudad de Mar del Plata.
Estaba trabajando en un Mural en homenaje al plástico Juan Carlos Castagnino, su maestro y amigo. pero a los 94 años de vida, de lucha y fuerte compromiso político el 21 de noviembre de 2008 dejó los pinceles y sus enseñanzas para las futuras generaciones de artistas, luego de cumplidos ochenta años con el Arte en mayúsculas.


El artista y la sociedad
La sociedad moderna llamada de consumo, empuja al artista al aislamiento como única manera de crear. Trata de aislarlo en la práctica, del resto de la sociedad, ya sea presentándolo como “loco, peligroso o anarquista” como a Van Gogh o Gauguin y otros, o excepcionalmente “vedetizándolo”, halagándolo como ser superior, único, genio de nacimiento, que sólo se debe a sí mismo.

Otras veces lo empuja por el camino del alcohol, las drogas etc. para poder crear, lo que conduce al aniquilamiento físico del artista. Sin embargo, éstos no siempre se dejan anular artísticamente. Lo que generalmente hacen es reproducir en sus obras el mundo que los rodea, que los aísla, que los persigue o los halaga, ya sea directamente o a través de símbolos. Saca fuerzas de su debilidad y en una dura lucha con la sociedad y consigo mismo los vuelca en la tela enriqueciéndola en forma singular. No es el aislamiento ni la persecución lo que hace a los grandes artistas, como no lo es el alcohol, las drogas o la miseria. En todo caso, todo eso da un tinte particular a sus obras.

El artista y su obra son siempre un producto social. Surge de determinadas condiciones históricas y él representa una avanzada cultural de una clase social o grupo social en ascenso o dominante, según las circunstancias.”


Ítalo Grassi
La imaginación creadora en el Arte
Ediciones Cuatro Autores - 1982


Italo Grassi – Sin título-2004
Foto: María Helena Leal Lucas



Estética del Renacimiento (Octava Parte)

por la Lic. Alicia Grela Vázquez

En el Renacimiento el hombre se afianza como individuo. Aún persiste algo de la estructura del taller medieval, como en las escuelas de pintura. Pero se pierde el anonimato del artesano y del artista. Los grandes dejan su impronta en la obra que ejecutan y reciben el reconocimiento de sus contemporáneos. Desaparece el sentido comunitario.
El Renacimiento es por antonomasia: Italia y su núcleo: las Artes Plásticas. Pero también en el resto de Europa hay una gran actividad pictórica, distribuída en focos de mucha importancia.
Flandes (Bélgica) con Gante y Brujas como centros comerciales reúne mercaderes y artistas dispuestos unos y otros a incrementar sus utilidades.
Los hermanos Van Eyck pintan el retablo, con el tema de la Adoración del Cordero Místico.

Van Eyck - Adoración del Cordero-1432

También toman escenas de la vida cotidiana como en el retrato de Giovanni Arnolfini y su esposa. Así se inicia una tradición muy exitosa en la región. Se les señala como descubridores de la técnica de la pintura al óleo aunque sin pruebas definitorias. Lo que es indudable es que entonces se capta el conjunto de posibilidades que ofrece este material y sus ventajas frente a otros. La pintura al temple (excelente y durable), con huevo como aglutinante es sustituida por el aceite que añade más brillo al color.

Van Eyck-Retrato de Giovanni Arnolfini y su esposa- 1434- National Gallery London

La escuela flamenca, a través de sus seguidores se sirve de esa técnica para dar a sus producciones características subjetivas, propias de cada uno de los artistas. Además ellos toman el paisaje como único tema.Un parrafo aparte merece El Bosco: Hyeronimus Bosch, que es un auténtico predecesor del surrealismo. Imaginativo y fantasioso puebla sus pinturas con una multitud de seres oníricos e inverosímiles, con intención moralizante.


Jeroen Anthoniszoon van Aken - Autorretrato





El Bosco – El jardín de las delicias- tríptico



Jheronimus -Mesa de los pecados capitales

También debe distinguirse a Brueghel, realizador de grotescas y aterradoras fantasías. Además, cabe reconocer que en sus mejores obras muestra a sus contemporáneos en el trabajo y la diversión. Expresa satíricamente con pasión por la vida ruda del hombre común.
Brueghel es el nombre de varios pintores flamencos. Pieter Brueghel, el viejo es padre de Pieter Brueghel, el joven, quien le imita y copia estilo y temática.


Pieter Brueghel, el viejo



Pieter Brueghel, el viejo – El triunfo de la muerte



Pieter Brueghel, el viejo - Censo de Belén



Brueghel el viejo – Masacre de los inocentes

Brueghel el joven - Autorretrato


Pieter Brueghel, el joven - Danza de bodas al aire libre


En Alemania el mejor pintor y grabador renacentista es Alberto Durero, el Leonardo del norte, pues como aquel, estudia incansablemente y todo reclama su atención.


Alberto Durero – La muerte de Orfeo


Durero-Autorretrato




Durero – Estudio de la perspectiva


Durero –Los cuatro jinetes del Apocalipsis


Con Hans Holbein, en tiempos de la Reforma alemana se pierde casi por completo la tradición de temas religiosos. Lo más pedido es el retrato. La burguesía hedonista se suma a la nobleza buscando complacerse contemplando su propia imagen. En Inglaterra pinta a Enrique VIII con su corte.


Holbein – Enrique VIII


Holbein – Ana Bolena


En España descuella El Greco, Domingo Theotocópulos, quien pinta la Sagrada Familia y El reparto del Manto Sagrado en la sacristía capitular de Toledo. En el Escorial plasma El Martirio de San Mauricio y de sus compañeros. Suplanta la colorida paleta veneciana por otra más austera, cargada de blanco y negro, con algo de rojo, bermellón y azul. Es notable el adelgazamiento de sus figuras y el carácter ascético de sus dibujos. Entre sus obras maestras figuran El entierro del Conde Orgaz, una Asunción y un Cristo Muerto entre los brazos del Padre eterno.


El Greco – El entierro del conde Orgaz


El Greco – Asunción de la Virgen

El Greco – San Martín y el mendigo


El Greco, arquitecto, escultor y pintor es un artista de la Contrarreforma española. Gran parte de su obra se conserva en el Museo del Prado de Madrid, España. El Greco, como Santa Teresa de Ávila y San Juan de la Cruz es un artista místico. Con su ascetismo pretende erradicar de su expresión la sensualidad y la seducción que caracterizan las producciones de este período de la Estética Renacentista.